Si la sustentabilidad es el puente, la regeneración es la dirección,el horizonte, el futuro hacia el que nos dirigimos ahora mismo. La esperanza activa, la confianza, el apoyo mutuo, el sentido de pertenencia, el bien común, la colaboración y la perspectiva sistémica mueven a aquellas personas que encuentran en la regeneración un paradigma existencial y en el diseño regenerativo una forma de intervención salutogénica en situaciones complejas. Así como nos deleitamos con el arcoíris después de la tormenta, establecemos esta conexión cuando conocemos las diferentes y significativas acciones, que aunque pequeñas, son parte de este proceso que es regenerarse a uno mismo ya su entorno.